Marruecos Octubre 2008

2 Octubre 2008 Almería-Melilla

Esta noche empieza nuestro viaje a Marruecos.

Hoy nuestra ruta ha sido corta porque hemos dormido en Jaén y desde aquí hasta Almería, que es nuestro lugar de encuentro, solo hay algo más de un par de horas. Llegamos a la ciudad y buscamos el puerto. Una vez que llegamos, vemos un grupo de TT y gente, a los dos se nos quita un peso de encima, pues todo está en orden.

Ya estaban todos, excepto otro TT. Es hora de presentaciones puesto que nosotros no conocíamos a nadie del grupo. Todo esto me da un poco de apuro porque en momentos así me agobio bastante, aunque enseguida empezamos todos a hablar y se realizan las presentaciones de la manera más distendida, en 5 minutos parece que nos conocemos hace tiempo. La organización nos facilita unas pegatinas que nos apresuramos a colocar en los TTs, según las indicaciones de éstos. También nos entregan unas camisetas y el cuaderno de viaje. Acto seguido nos encaminamos fuera de las instalaciones portuarias para cenar. Localizamos en las inmediaciones un restaurante Italiano, que por cierto tomamos para nosotros. Nos sirvieron cena abundante que dimos cuenta a la vez que hablábamos y nos reíamos. Aquí empezó la aventura y las primeras sesiones de fotos.

Realizamos el embarque a las 23:00 hs., tiempo suficiente para acomodarnos, ya que el barco zarpó a las 24:00 hs. En principio lo de navegar es la parte que mas miedo me da, así que me dopare un poquito, para que me de sueño y pasar la travesía dormida. Una vez dejado el TT en la bodega, vamos en busca del camarote, que no tardamos en encontrar, son camarotes pequeños aunque bien organizados, tienen dos literas y baño con ducha. A continuación quedamos en el bar del barco, donde la organización nos explica todo lo relacionado con el paso de la frontera y el cambio de moneda. Un poco de charla y a dormir que la pastilla empieza a hacer efecto.

 

3 Octubre 2008 Melilla-Midelt

Sobre las 8:00 AM llegamos a nuestro primer destino, Melilla. La noche ha sido muy buena, dormida de un tirón. Antes de amanecer vemos desde la cubierta, en la lejanía, la bonita estampa iluminada de Melilla. El barco atraca sin problemas, y después de llenar los tanques en la gasolinera del puerto, ponemos rumbo a la frontera.

¡Por favor! En el lado Marroquí , todo está hecho un asco, las últimas inundaciones han dejado la frontera llena de lodo y fango, solo tenemos un carril para cruzar, allí no se ve ninguna brigada de limpieza ni nada que se le parezca. Aun así, no faltan curiosos que nos acosan con cosas para vender o con intención de prestarnos ayuda a cambio de algún euro. Después de unos cuantos trámites conseguimos, aunque lentamente, cruzar la frontera sin más problemas.

En nuestros primeros kilómetros por Marruecos llegamos a Nador, cuidad en la que aprovechamos para cambiar Euros a Dirhams. Como es muy temprano, dos horas menos que en España, tenemos que esperar a que abran los bancos.

Nos encaminamos en nuestra ruta, dirección Midelt, después de algunos kms. por asfalto cogemos una pista de piedra que nos va subiendo lentamente hacia nuestro primer contacto con el Plateau de Rekkam. Las lluvias que han caído en los últimos días han hecho bastantes destrozos. Las pistas están muy rotas, con lo que tenemos que extremar las precauciones. Vamos botando y botando, se nos caen hasta los empastes. Vamos haciendo risas a cuenta del camino y los baches, además de algún que otro chiste a través de la emisora. También vamos comentando el paisaje que se antoja muy diferente al que estamos acostumbrados, no hay duda, estamos en AFRICA. Es una zona seca salpicada de bosque bajo. Hacemos alguna que otra parada para picar algo de nuestras reservas y para alguna que otra cosita. Seguimos subiendo lentamente hasta que llegamos a una gran llanura. Es el PLATEAU de REKKAM; estamos a unos 1.500 mts. de altura. Es una grandiosa extensión, en la que la vista recorre la meseta y aun mirando al horizonte no se divisa más que piedra y vegetación baja, además de la gran nube de polvo que nuestros TT van levantando en el aire.

A mi este terreno me produce una sensación de libertad increíble. Van apareciendo pequeños poblados, como salidos de repente, con casas de adobe que se mimetizan en el entorno. Los niños y mayores saludan con las manos o con la cabeza. Yo me acuerdo de mis niños, y quisiera meterlos a todos en el TT, y llevármelos, pero también se que éstos son felices y que es solo una forma de acallar mi conciencia. La forma de vida es tan distinta a la nuestra, viven aparentemente tan justos, solos o en pequeños grupos por esas inmensas llanuras, es absolutamente distinto a nuestra manera de vivir.

Seguimos camino por la meseta y vemos los primeros dromedarios y también tenemos contacto visual, a lo lejos, con el medio Atlas. Vamos haciendo paradas, para comer, para beber una cerveza, para hacer unas fotos, etc…

El día se nos va complicando porque debido a las lluvias las pistas están muy rotas y nos hacen dar algún que otro rodeo. Se nos hace de noche aunque solo son las 18:30. Y comenzamos la primera nocturna verdad Dani? Ahora es más aburrido, no se ve nada a parte de lo que alumbran los TT, por la emisora vamos haciendo comentarios y contando chistes, lo cual hace más ameno el viaje. Tras recorrer 540 kms. desde Melilla, llegamos al Hotel de Midelt a las 23:00 hrs., vamos como un tiro a cenar, puesto que nos están esperando y es muy tarde.

Estamos todos muy cansados pero muy contentos, el primer día de aventura ha sido eso, viaje de resultado incierto..., verdad Jon?

Pobre pulga que pillemos en la cama, mañana nos espera otro día de campeonato y tenemos que madrugar. A pesar de las muchas horas por pistas en las que hay de todo menos asfalto, que el hotel está algo viejo, y que es la primera vez que hacemos esto (de esta manera) ,estamos muy satisfechos, y nos dormimos esperando que llegue el siguiente día.

4 Octubre 2008 Midelt-Boumalne Dades

Amanece en Midelt. Para lo dormilona que yo soy, no me ha costado despertar y estoy muy despejada. Bajamos a desayunar y para las 6:30, estamos listos en los TT. ¡a ver como se nos da el día!

Un poco de carretera y entramos en pista. Un TT, empieza a dar algunos problemillas debido a tanto bache y piedra, y hoy es un día de pista dura. Las pistas están muy rotas debido a las aguas, seguimos dando botes. Vamos dejando un río a nuestra izquierda, baja con mucho agua. Que gran verdad es eso de –el agua es vida-, todo a su alrededor es verde, grandes palmeras, árboles y arbustos de diversos tipos, y lo que parecen ser campos de cultivo pero sin cultivar. Muchos frutales, manzanos, granados, etc…

Extendiéndose con su orilla van apareciendo infinidad de pueblos en las laderas del alto Atlas, toda su arquitectura continua siendo de adobe. Todo es marrón y ocre, muy brillante por la luz del sol. La gente sale al paso, especialmente los niños, y te piden de todo, tabaco, ropa, dinero, etc…, algunos se ponen pesados. Nos dicen que no hay que darles nada para no crear necesidades que no tienen. Pero a nosotros nos resulta difícil no hacerlo, en Jaén nos colocaron un montón de ropa para repartir, la mayor parte la dejamos en una escuela de un pueblo. También hemos usado la ropa como moneda de cambio, sobre todo para conseguir indicaciones de cómo llegar a algún sitio, o si se podía pasar mas adelante.

  

Seguimos camino y la pista sigue igual, piedra, piedra y más piedra, ¡vaya botes!, es ya motivo de risa en el grupo. Salimos a una carretera, nos reagrupamos y seguimos ruta por el Atlas. Entramos en un valle por el que seguiremos el curso de un río, en el que nos llaman la atención los enormes cedros, lo verde del paisaje y la infinidad de poblados. Siempre sin perder de vista el río, empiezan los vadeos mientras seguimos la ruta. ¡Que gozada!, pasamos salpicando agua, tenemos barro hasta en la antena, solo se ven sonrisas a través del cristal. Todos estamos emocionados, no cesan los vadeos tanto de río como de grandes charcos acumulados en la pista, me atrevería a decir que mas de 50 vadeos. En ocasiones los pasos son bastante complicados, los copilotos se bajan de los TT, y van pasando con cuidado, guiados por las indicaciones de los compañeros. Sigo diciendo ¡Que gozada!, a pesar de que todo esta tremendamente roto por el agua.

  

Se ven perfectamente las marcas que han dejado los regatos bajando por la ladera y los trozos de pista que el río se ha llevado y que a nosotros nos obliga a transitar por el propio lecho del río, una pasada.

Hacemos una parada técnica para comer, beber y desbeber, en un valle precioso formado por dos gargantas. Tenemos algún coche con pequeños problemas, pero con la ayuda de nuestro estupendo mecánico todo se va solucionando. Mientras comemos, aparecen varios camiones llenos de gente que suponemos van al mercado del pueblo que acabamos de atravesar, nuestros TT, les cortan el paso hasta que los retiramos, solo viajan hombres, algunos se bajan del camión para ayudar a sus conductores a vadear el río y otros a hablar con nosotros o pedirnos cosas. Es impresionante estos camiones viejos cargados a tope, vadeando el río, parece que van a volcar en cualquier momento. Al final seguimos nuestro camino, paralelos al río, pasando por varios pueblos, hay mucha gente en la calle, la mayoría hombres, es un ir y venir, no sabemos de donde a donde. Algunos sentados o tumbados en el suelo charlando. A las mujeres y a las niñas se las ve trabajando en el campo o cargando bultos, o tirando de alguno de la inmensidad de burros que tienen en este país. Seguimos rumbo, continuando por pista rota y con mucha agua y barro, esto es disfrutar!!!

No creo que lleguemos a las gargantas de Dades para cruzarlas de día. Hay un cambio de planes, se nos a hecho de noche otra vez. Ponemos rumbo al hotel por la garganta del Todra, y las otras las veremos mañana. Se nos ha parado el Jeep de Paco, pensamos que es debido a tanto vadeo, no hace mas que fundir fusibles y no arranca. No damos con la avería, se esta haciendo de noche y se decide que David el mecánico, se quede con Paco para remolcar el coche. Una hora después consiguen dar con la avería, la nevera instalada en el JEEP hace un corto y se carga los fusibles, la desconectan y siguen camino.

Nosotros bajamos del alto Atlas por las gargantas del Todra, y aunque es de noche, lo que se ve con la luz de la luna es impactante, acrecentado también por varios vadeos y cortes de pista debido a las lluvias. Que pena no verlo de día.

Después de 358 kms. de pistas por fin llegamos al hotel, una vez mas de noche y muy cansados. Esta vez el hotel es espectacular, es el Xaluca, de reciente construcción, con un gusto exquisito, en el camino a nuestra habitación, en el pasillo, un cristal tapa un fósil que parecía un cocodrilo. En esta zona se dan mucho los fósiles marinos, porque hace millones de años todo esto fue mar.

Después de quitarnos el polvo del camino con una ducha gratificante bajamos a cenar, muy buena cena y después una copita y charla en la terraza, poco tiempo porque hacía frío. Se decide que después de estas dos etapas tan duras, el día siguiente será de transición, se intentará llegar pronto al siguiente hotel que esta a 300 kms., y hacer un poco de turismo.

5-10-   2008.DOMINGO

BOUMALNE DADES—ZAGORA

Hoy Carlos, Jennifer y el mecánico (David) van derechos a Zagora por carretera para llevar el Ranger de Carlos al taller. El resto del grupo nos dirigimos hacia las gargantas del Dades. El paisaje está lleno de contrastes, verde al lado del río, con palmeras y árboles frutales y en cambio la tierra es seca y muy roja.

 

Ponemos rumbo a Zagora cruzando las últimas zonas del Anti-Atlas. Todo es montañoso y los pequeños pueblos se reparten por todo el valle. Vamos bajando el puerto, con cuidado, y paramos para hacer fotos. Se ve de nuevo el valle del Draa ¡espectacular!. Después de bajar, el paisaje va cambiando y todo se vuelve más marrón, más rojo y ocre. Vamos discurriendo con el paisaje por la carretera y poco a poco llegamos a Zagora. Lo primero es ir al taller para saber que pasa con el TT. ¡Menudo revuelo se arma cuando llegamos! Aparecen chicos por todas partes, te ofrecen comprar coches de madera que ellos mismos hacen (replicas casi perfectas de cada uno de los TT, que hacen bajo pedido durante la noche), se ofrecen para llevarte de tiendas, te sacan averías de cualquier sitio, etc… Nosotros seguimos a lo nuestro y después de ver que están a todo trapo con el RANGER, nos dirigimos al hotel. Allí como siempre lo primero es quitarnos el polvo con una buena ducha, bajar a cenar y luego se hacen dos grupos, unos se van del hotel a tomar algo y otros nos quedamos charlando en el hotel antes de ir a descansar. En cualquier caso se trata de cambiar impresiones y comentar las hazañas de la jornada. Comparando este día con los dos anteriores, ha sido balsámico. Hoy nos vamos a dormir menos machacados.

6-10-2008.LUNES

ZAGORA-DUNAS DE IRIKI

¡Otro madrugón!! No me lo puedo creer, yo de vacaciones y levantándome pronto sin protestar. Pero hay que aprovechar el día. Bajamos a desayunar a las 7,30 y a las 8,15 ya estamos en los coches. Vamos hasta el cartel que indica la entrada en el desierto, tiene un dibujo de unas dunas y unos camellos, pone TOMBOUCTOU 52 JOURS. Nos sacamos unas fotos (parece ser típico). Cuando ya estamos todos y todo está en orden nos ponemos rumbo a nuestras primeras dunas y nuestra primera acampada en el desierto. Vamos dirección Foum Zguid donde paramos para comprar pan y agua antes de entrar en una de las zonas más solitarias y más deserticas del país. También aprovechamos para hacer alguna llamada de teléfono, puesto que estaremos un par de días sin cobertura. Nos para la policía pero parece ser que es para preguntar dónde vamos con ánimo de hacer un informe de cuanta gente visita la zona.

 

Este primer contacto con el desierto era previsible: arena, polvo y grandes extensiones sin nada a la vista. La pista que seguimos es mala ¡cómo no! Y con mucha piedra ¡otra vez! ¡y una señal dice 56km al Iriki!!! Durante el trayecto vamos haciendo diversas paradas: para hacer fotos, para picar algo, o solo para estirar las piernas. Así va transcurriendo la mañana y el mediodía, entre polvo, arena, piedras y sobre todo risas, muchas risas ¡¡la emisora ha resultado ser todo un descubrimiento!!   Poco a poco el paisaje va cambiando y se vuelve más desértico con más arena y menos piedra, nos vamos adentrando y acercando al lugar de nuestra acampada. Llegamos primero al centro del lago (seco) Iriki , allí hay un árbol muerto. Es una gran extensión llana y podemos darle un poco de caña al coche. Nos cuentan la leyenda del lago: habla de un dragón que cuida del lugar y se cobra un tributo si no cuidamos su territorio. Suele despachar algún coche que otro.

 

En este caso el Dragón también se cobra una víctima. Tras una parada para eslingar a la L200 y al Sorento, el Jeep V8 de Paco y Sonia, hace aguas. Es decir, rompe la bomba del agua. Que putada, esperando meter esa maravilla de máquina preparada hasta el último detalle para navegar por las dunas, y se queda tirada a las puertas, cagüen…

Como estamos cerca del lugar donde vamos a campar, decidimos desplazarnos hasta allí, con la intención de resolver el dilema. Había que ver como entró el Jeep (en frío), a la primera duna. Duró poco pero pareció una tormenta de arena. (MEMORABLE).

Vamos tomando posiciones, los TT, las tiendas, mesas, (algunos duchas y hasta water), todo se va colocando para pasar una noche lo más cómoda posible, hay que ver con que ilusión se preparan este tipo de viajes/aventura. Enseguida se enciende una gran hoguera y se brinda con cava catalán por haber llegado al desierto. Cada uno busca su lugar, algunos en las sillas alrededor de una mesa plagada de viandas. Otros tumbados alrededor del fuego, y uno, Dani, emperrado en montar la ducha que dos horas más tarde dejo por imposible. Eso si, con el wáter le fue mejor, aunque no sabemos que hizo con la bolsa después de utilizarlo.

Va transcurriendo la tarde/noche, algunos cenan, otros no hemos dejado de comer, no se por dónde salen botellas de Ron, Whiski, Orujo, Cava, Pacharán, etc…, todo ello regado de Coca-Cola, y sí, a algunos se nos cambio la voz. En fin después a dormir en el hotel de las mil estrellas, maravilloso.

 

7-10-2008.LUNES

DUNAS DE IRIKI – MAHMID

No hemos descansado bien, entre los cubatas, el calor, y el suelo tan duro de la tienda, nos ha costado dormir y ha sido poco tiempo. Hoy el mulah nos ha despertado temprano 6:30, con su música. Hay que empezar el día pronto, hacemos dunas por primera vez. Después de levantarme me alejo del campamento para llevarme conmigo mi mal humor mañanero. He dormido poco y no tengo ganas de hablar con nadie. He estado sentada en la arena viendo como terminaba de amanecer, había un silencio tan grande que la sensación de soledad era aun mayor, no se ve nada, no se oye nada. Solo se ven los rayos del sol que van iluminando duna por duna, dotando de color a un lado de las dunas, permaneciendo en sombras el otro. Una de las cosa más bonitas que he visto en mi vida.

 

De vuelta al campamento disfrutamos de un desayuno rapidito, recogemos las tiendas y las toneladas de basura de la noche anterior. Cargamos todo en los TT, y partimos hacia nuestra primera toma de contacto con las dunas, excepto Paco y Sonia, que irán remolcados por David hasta Zagora, con la intención de arreglar la bomba del agua y poder hacer dunas los días siguientes.

Los demás nos reunimos con el Mulah, el cual nos indica el orden de los TT. Los de batalla más corta irán delante para ir rompiendo las crestas, preparando el camino a los de más batalla que son más propensos a empanzar en las crestas. Además nos llena de indicaciones de cómo conducir duneando y que cosas a tener en cuenta. No sé, esto de ser novatos y no saber a que me voy a enfrentar me pone nerviosa. ¡Ya se verá!

 

El día ha sido bastante duro, se han unido muchas cosas que nos lo han puesto del revés: nuestra inexperiencia, somos los últimos, la arena queda muy suelta, aun no sabemos localizar rutas alternativas, nada mas empezar nos quedamos por no haber bajado bien las presiones, hay que dejarlas a 0,8, hacemos un gran esfuerzo para salir, ayudados por todos los miembros de la aventura…, y como no, del Mulah, que estoy segura de que le harán santo. Nos ponemos nerviosos, no entendemos las instrucciones, aunque nosotros no empanzamos, esto lo hemos entendido, la L200, se queda junto con otros TT, una y otra vez varada. ¡que calor!, ¡que sudada!, el mulah de una duna a otra andando, dándonos explicaciones de cómo sacar los TT, que si con la pala, que si con las planchas, o a tirón con la eslinga, todo esto lo aprendimos bien. Poco a poco íbamos pasando el primer cordón de dunas, ¡por favor!, he recordado porque no me monto en ninguna atracción. La subida de la duna es mala pero nada comparado con la bajada: estás en la cresta, colgada con la mitad del coche hacia abajo, sin ver el suelo y hay que tirarse ¡ja! ¡Esto si que es un acto de fe! Ahí vamos, voy frenando yo también con los dos pies y tengo el estómago en la garganta del vértigo que me da. Grito y cierro los ojos, no se si volveré a tener el estómago en su sitio. Llegamos al llano, un respiro, y otro cordón de dunas ¡si no me he recuperado del anterior!.

 

Más arena, más calor, más quedarnos atascados, más mal humor…, todo se une. Pero nosotros duro y dale seguimos como campeones. Así vamos pasando de una duna a otra hasta completar los 20 km. y terminar con el sufrimiento de mi estómago ¡hemos tardado 6 horas! en pasar. Ponemos rumbo al Oasis Sagrado en el que hay un pozo con agua con la que nos refrescamos antes de picar algo, no sin la advertencia de un nativo que nos indica que no ensuciemos el agua, que ellos dependen de ella y la usan para beber.

Después de pasarlo tan mal nos merecemos el descanso del guerrero así que decidimos ir derechitos al hotel y darnos un bañito en la piscina. Hacemos dos grupos, uno irá rápido al hotel, y el otro, en compañía del mulah Jon, irá con los TT con pequeños problemas mecánicos (a Carlos le continua el ruido en zonas bacheadas). El primer grupo de cinco TT, capitaneados por Toni, inician la marcha a buena velocidad siguiendo lo wp facilitados por la organización. Después de varios kilómetros recorridos nos damos cuenta de que nos estamos alejando. Toni se percata que nos hemos pasado unos 10 kms. a la izquierda, parece ser que uno de los wp, esta mal. Toni, nos comenta la posibilidad de regresar a ese punto, o continuar corrigiendo el error campo a través. ¡Ya esta aquí la nocturna!, por supuesto elegimos la segunda, hamadas interminables pero preciosas, arenales, un sinfín de obstáculos que nos hicieron divertirnos de lo lindo. Por fin llegamos al hotel Kasbah Tabarkat, esta vez se ha cumplido la fábula de la liebre y la tortuga, hubo risas. El grupo lento llego antes viniendo mucho más despacio. Cosas tiene la vida del todoterrenero. A nosotros que nos quiten lo bailado.

Nos pegamos un baño en la piscina, ya casi de noche, tomamos unas birras, mientras nos prepararon una suculenta cena que degustamos en la calle, un precioso hotel con unos propietarios catalanes. Un lugar para recomendar. Las habitaciones a modo de bungalow, espaciosas, bien limpias y equipadas. Justo antes de cenar llegan de Zagora David, Paco y Sonia. Nos cuentan la aventura de la cual no quieren acordarse, el HDJ 80 de David remolcando durante 8 horas al Jeep de Paco y Sonia. El Jeep sin batería. No se pueden comunicar por emisora con David, este no mira para atrás, los otros van como colgados del HDJ, es horrible. La eslinga que se quiere enredar en el tren delantero del JEEP, los botes por las pistas son increíbles, Paco y Sonia han estado 8 horas dentro de una coctelera. En fin, que han llegado y quieren olvidar el viaje, han pedido una bomba de agua a cada rincón de Marruecos y están esperando respuesta, parece que se puede arreglar y que el último día de dunas, podrán dunear con el Jeep. Cenan con nosotros y a descansar.

8-10-2008.MIERCOLES

MAHMID- (DUNAS DE OUZINA) ERG CHEBBI

Después de un gran desayuno, emprendemos la ruta del día. El grupo se divide en dos, unos por carretera (problemas en los TTs), y otros seguimos la ruta original que son algo más de 200 kms. por pista. Nuestro objetivo son las dunas de Erg Chebbi.

Empezamos el día por pistas de piedras ¡como no!, y sólo con esto ya tenemos para reírnos un rato. Vamos circulando paralelos y muy cerca a la frontera con Argelia, con enormes hamadas y algún que otro puerto. E una región muy solitaria, no salían ni niños a recibirnos. Pasamos varios controles militares, cada paso se saldaba con unos cigarrillos, o si a Dani le caían simpáticos algún purito de los suyos. Hacemos varias paradas para contemplar el paisaje y hacer fotos. Al llegar a un cruce paramos en un albergue, la familia nos acoge con mucha amabilidad y nos invitan a té. Un chico con mucho arte nos lo prepara allí delante, además la señora de la casa nos prepara unas estupendas ¡pizza bebeber!. Solo podemos dar cuenta de algunas de ellas puesto que no hace ni 2 horas del desayuno. Nosotros a cambio le damos ropa y algún que otro detalle por el buen recibimiento.

Llegamos a un gran llano y aquí tenemos un momento de correr y divertirnos, pronto se acaba, vuelven los baches, los oued, las peligrosas bañeras, alternando con tramos de pista rápida. Eso si, polvo para exportar. Siguen también los chistes y las risas por la emisora ¡es como estar todos en el mismo coche!

En otro albergue, hacemos la parada para comer. El menú es una especie de pisto con huevo, con una pinta extraña pero comible. El lugar estaba un poco cutre, lleno de moscas. David que parece el corte inglés del desierto, sacó y colocó una cinta atrapamoscas, hicimos media docena de capturas, menos de las deseadas. En fin, allí quedo la trampa.

En Ramlia nos dicen que tengamos mucho cuidado porque el río baja con mucha agua.

Seguimos camino, seguimos disfrutando de los paisajes y de la conducción. Al rato nos encontramos con el vadeo que nos habían ya prevenido. Efectivamente, baja con mucha fuerzaa. Estamos sopesando la posibilidad del vadeo cuando David se queda embarrado en la orilla, con el winch sale con facilidad. Mientras hablamos llegan un par de chicos y uno de ellos nos indica que más abajo hay un paso mas fácil, sin riesgo quedarse dentro del rio. Decidimos hacerle caso y le montamos en el coche de David. Al poco nos encontramos con un grupo de estirados TTs, que se disponían a pasar por el paso que nosotros habíamos dejado por imposible. Ni nos saludaron, pasaron con aires prepotentes, de tal manera que no tuvimos la oportunidad de contarles el sitio por el que íbamos a vadear.

 

Una vez cruzado el rio vimos al otro lado al grupo de TTs, metidos hasta las trancas en la otra orilla, justo donde nosotros decidimos dar marcha atrás. Es una pena que no fueran mas sociables, pero bueno, eran unos cuantos y estaban bien preparados, yo creo que en 5 o 6 horas ya saldrían de aquel fangal.

Seguimos adelante y empezamos a ver que todo se está poniendo oscuro y hay mucho relámpago ¡se está formando una tormenta! ¡Increíble!. Cientos de relámpagos se veían en el horizonte, no caía mucha agua, lo que hacía pensar que en algún lugar no muy lejano se estaba liando una buena.

Habíamos quedado en el hotel de  Alí el Cojo y allí nos encontramos al otro grupo. Debido a la mala cara del tiempo se decide no hacer la acampada y vamos a la caza y captura de algún hotel, lo cual se nos hace difícil porque están llenos. Nosotros somos muchos y queremos estar todos juntos. Vamos atajando por diversos caminos llenos de barro, que nos obligan en algún caso a colocar reductoras y bloqueos. Después de bastante andar y atravesar un banco de dunas, en el que el Mulah, por la emisora y en términos de mando nos dijo a no se que hora de la noche y después de un día movidito, ¡BAJAR PRESIONES A 0,8!, Ni se rechisto. Todos a la puta carrera a bajar presiones. Estábamos a 1 km del albergue Dunas dôr, yo ya le pondría otro nombre…De oro solo el nombre porque ¡vaya vaya con el hotel! Mejor será no pensar en nada…

Mañana será otro día y guardaremos las fuerzas para las dunas.

 

9-10-2008.Jueves.

ERG CHEBBI

¡¡¡LLUEVE!!!

¡Está lloviendo y hace frío! El cielo está bastante cubierto y la mañana se presenta desapacible. Hay una temperatura de trece grados y hay un gran arco iris doble, aunque yo no veo el sol por ningún lado. Nos vamos esperando, nos vamos esperando… y ya estamos todos escuchando las indicaciones del mulah: el orden en la fila, como llegar y hacer la cresta, que hacer para no hundirnos en la arena…Yo estoy un poco preocupada porque ayer lo pasé mal y Jon no me ha sacado de ningún aprieto cuando le he preguntado como son las dunas de hoy. 

Para empezar ¡zas! La primera en las narices; Miguel ha tenido un pequeño problema en una inclinación lateral, se han asustado, sobre todo Trini y aunque Jon les ha intentado convencer para que se queden se han vuelto al hotel y Jon les ha acompañado. Allí nos veremos a la hora de comer. Una vez de regreso Jon, lo primero que veo es que, por suerte para mi, las dunas no son como las otras.Estas son como un gran mar de arena, sin tanta diferencia de tamaños entre ellas. Empezamos a dunear, se nota en todos la experiencia del día de Iriki, también la arena al estar mojada ayuda. Por otro lado el tiempo es desapacible, no invita a salir del coche. Hace mucho viento con arena y lluvia, se pega por todas partes, el parabrisas se llena de arena, los espejos, este tiempo hace muy difícil la conducción.

 

Vamos duneando sin apenas paradas, cada vez mas velocidad, subidas, bajadas, looping con inclinación de izquierdas, looping con inclinación de derechas…, uf, uf, uf, 3ª, 4ª reductora y leña, leña y leña. ¡Que gozada! Esto si que es divertido. Aitor se ha dado cuenta de que yendo en 2ª al mitsu le sobra fuerza pero no coge la velocidad necesaria. Esto le ocurrió en las dunas de Chegaga , en las inclinaciones se le iba el culo una y otra vez. Ahora en velocidades más largas el problema se ha acabado, en algunas dunas subimos en 5ª reductora, como un obús, ojo  al llegar arriba, hay que coronar la cresta sin pasarse ni quedarse corto. Todos los coches van saliendo airosos de todos los obstáculos, y aunque hace mal tiempo, la satisfacción se refleja en las sonrisas de la gente. Hemos disfrutado como niños, la mañana pasa volando y ponemos rumbo al Oasis de Oubira.

 

Esto parece el metro en hora punta, tts, motos, quad, tablas de snow…, alucinante. Entramos en una haima y disponemos las viandas en la mesa: jamón, lomo, chorizo, latas, patatas fritas, etc…, la comida de nuestras reservas y la bebida del pequeño bar que allí se encuentra. Comentamos las incidencias del día, todo el mundo contento y ya nos atrevemos a ver lo errores de otros TTs que se encuentran en el oasis, quedándose empanzados delante de nuestras narices, ja, ja, ja. Para chulo, nuestro Mulah, a un flamante y nuevo TOYOTA, empanzado en una cresta, le pasa por la derecha… pero sin parar. También éstos llevaban buenos coches e iban varios, sin duda lo sacaron sin más problemas.

Junto a este oasis existe una gran olla en lo alto de una duna, la cual tiene una difícil subida y más estando machacada de rodadas. El mulah la llama La Olla de la Muerte.

Fueron Jon, Toni, David y Ander los que consiguieron subir, a unos les costo mas que a otros pero subieron, algo que los demás TTs que se veían por la zona miraban de lejos. Solo un Mitsu y un Jimny preparados hasta los dientes lo intentaron, y no llegaron ni hasta donde llegó Ricard con el Frontera para hacer unas fotos.

La vuelta al hotel fue un paseo de diversión, sin ningún percance, Ander le dejó a Paco los mandos del Mitsu, para desquitarse de ir de copiloto. Llegamos al hotel hacia las 16,30, tarde libre, guau que siesta! nos tuvieron que despertar a las 20, para cenar.

 

10-10-2008. VIERNES

ERG CHEBBI - ERG CHEBBI

 

Nos levantamos muy pronto para poder aprovechar la mañana. A las 8:00 ya estamos todos desayunando, excepto Miguel y Trini, que no hacen dunas y nos esperan en el hotel para comer. La idea de hoy es pasar la mañana cuneando. El tiempo no es nada bueno, parece mentira que en el desierto haga hasta frío y este nublado, la temperatura no sube de los 13 grados. Hay un fuerte viento y esto hace incomodo salir del coche.

Duneamos sin problemas, se nota la experiencia acumulada, y también la ayuda de la arena mojada. Vamos en busca de la gran duna, parece ser que es un reto subirla, ya veremos que es lo que pasa. Cuando la tengo delante pienso “yo me bajo del coche”. Tengo suerte de que Aitor está en una situación una tanto delicada debido al mal del desierto, y no quiere ni intentarlo. Primero sube el mulah Jon, seguido de Toni con algunas dificultades, detrás Ander con más dificultades y por fin David con infinidad de dificultades, pero los cuatro consiguen subir y se regocijan con ello.

Aprovecho estos momentos para coger un poco de arena del Sahara Marroquí que emplearé como regalo barato: “bueno para ti, bueno para mi, amigo bereber”. La arena sigue golpeando debido al incesante viento. Vemos como las dunas se mueven con el viento, algo que causa una tremenda sensación de libertad. De regreso, seguimos duneando plácida y rápidamente hasta llegar al hotel. Nos esperan Miguel y Trini, nos tomamos un traguito mientras nos preparan una suculenta comida en el restaurante. No estaba el día para viandas frías en la calle. La comida ha tenido una sorpresa, la peque del grupo Jenni, cumple 20 añitos, también fue el cumple de Trini hace unos días. Paqui y Dani acaban de hacer su aniversario de boda. Aprovechando que el hotel se quedó a oscuras debido a la tormenta, sacaron una tarta para festejar dichos acontecimientos. La trajeron los camareros con velas y a ritmo de tambores, muy bonito. Allí estábamos el grupo solo, cantando a pleno pulmón, cumpleaños feliz. Una vez terminada la celebración y con mucha pereza nos ponemos en marcha, se había decidido anular la noche en las Haimas de Alí el Cojo, y ponemos rumbo por carretera a Erfoud. Dormiremos en el hotel Chergui.

Al llegar a la ciudad visitamos una fábrica de fósiles y una tienda de artículos de artesanía y plata bereber. Compramos, como no, algunas cositas y nos fuimos al hotel.

En el hotel nos recibieron con unas extrañas trompetas, que tocaban a ritmo de danza y tambor, a continuación toma de habitaciones, duchita y bajada a cenar. Aunque prácticamente estábamos solos, la cena era muy agradable. Como Aitor esta malito, nos vamos rapidito a dormir.

 

11-10-2008. sábado

ERFOUD - MIDELT

 

La mañana empieza con un buen desayuno y a las 9 ya estamos en la carretera rumbo a Midelt. Paco y Sonia se quedan con David porque van a recoger su coche. Cogemos la primera pista del día. Para no perder la costumbre de este viaje, la pista está fatal, muy rota a consecuencia de las lluvias. Aún así seguimos por ella y cuando estamos a unos pocos kilómetros de llegar a la carretera nos encontramos con un gran obstáculo, es el último pero es grande.

El paso del río por donde queríamos cruzar está imposible; baja colmadito de agua. No queremos dar la vuelta porque eso supondría hacer 70 kilómetros de más por unas “agradables” pistas y si lo cruzamos, la carretera está a la vista.

Nos encontramos con un Land Rover nativo sin gasoil, y Aitor y Dani ¡chulos ellos! Se han puesto a chupar de una goma para intentar sacar gasoil del depósito, pero no tuvieron suerte, en estos coches modernos no es tan fácil sacar el gasoil del depósito y no pudimos ayudarles. Seguimos buscando la mejor manera de cruzar el río. Después de muchas pesquisas el Mulah decide atravesarlo con un nativo colgado del parachoques trasero. Al llegar a la otra orilla nos dice por radio que ni se nos ocurra intentarlo, el Toyota se ha tenido que emplear a fondo para poder pasar con un suelo tan resbaladizo y una corriente tan fuerte. Por lo tanto nosotros, capitaneados por Tony volvemos por nuestros pasos. 

Siguiendo el tendido eléctrico y paralelos al río durante varios kilómetros continuamos dirección oeste. Seguimos en contacto con Jon que está teniendo innumerables problemas debido a la gran cantidad de barro y fango y la no existencia de pistas. Nosotros seguimos buscando la manera de cruzar el río. Al cabo de un tiempo Jon nos indica por la emisora que ni se nos ocurra vadear el río, nosotros estamos ahora en el lado bueno debido a que las aguas han destruido un puente y tardaran en arreglarlo al menos 3 horas.

Seguimos, pues, dirección norte siguiendo el tendido eléctrico haciendo todoterreno en estado puro. En esta etapa no tenemos tiempo ni para comer. No queríamos perder ni un segundo. Unas horas después conseguimos llegar a la carretera, la cual nos llevó directamente al hotel sin ningún problema, pero, eso si, era de noche. Allí encontramos a Paco y Sonia ya con su coche, al que solo le habían arreglado la bomba para llegar a casa. Faltan por llegar Jon y Leire que lo hacen un par de horas después. Nos vamos derechitos al comedor. La cena es exactamente la misma que la vez anterior ¡poca variedad, la verdad! Al finalizar la cena pasamos todas las tarjetas de memoria de nuestras cámaras al ordenador de Ricard, para que éste nos envíe una copia de todo a todos. Despedida y hasta mañana.

 

12-10-2008.Domingo.

MIDELT-FES

 

Hoy, como siempre, también hemos madrugado. La etapa es de transición por carretera, por el camino hacemos alguna parada, para ver a los monos del Atlas o para comprar algún souvenir de los que hacen con madera de cedro.

 

Llegamos al hotel al mediodía. Allí, rápido, rápido, recogemos las llaves, llevamos las maletas a las habitaciones y de vuelta abajo donde nos espera un guía para llevarnos a la Medina. Nos vamos en algunos de nuestros coches (excepto Leire que está malita y Jon que se queda para acompañarla). Después de aparcar nos internamos en el laberinto de calles que es la Medina. No se como explicar lo que hemos visto, intentaré hacerlo sin ponerme muy escrupulosa.

    

Antes de comer vemos algunos barrios como el de los carpinteros, el de los zapateros y alguno más. Las calles son estrechas, hay gente por todas partes, porquería en todas las esquinas y huele un poco raro. Nos vamos a comer. El lugar es cuando menos pintoresco. La comida más tirando a mal que a bien. Al salir, algunos más atrevidos, se toman un café en el “bar” de al lado. Y después a seguir caminando por calles estrechas, sucias y llenas de gente. Vamos a ver el barrio de los curtidores. Antes de entrar en el edificio nos dan una ramita de menta, para el olor. Subimos hasta el último piso y desde allí se ve a la gente trabajando. El olor es nauseabundo. No puedo más y me alejo de la balconada. El estómago lo tengo patas arriba y no veo el momento de marcharme. ¡no me extraña que sea el trabajo mejor pagado!

Por fin bajamos hasta el lugar donde exponen las prendas ya terminadas. Hay de todo: chaquetas, bolsos, zapatos, maletines… Aitor compra uno después de una dura negociación. Salimos de allí y seguimos viendo otros lugares. Algunos no se pueden visitar porque están prohibidos a los no musulmanes. Nuestro objetivo es la Madraza, que es la universidad donde estudian todo lo relacionado con la religión (solo hombres). De aquí salen los Imam que tienen un gran poder religioso y también político.

Aún nos cuesta un poco salir de las callejuelas. Llegamos a los coches y nos vamos al hotel. Antes de la cena, vemos un montón de fotos mientras nos tomamos unas cervecitas ¡que divertido!. Pasamos al comedor, que está bastante lleno. La cena ni fu ni fa. Lo mejor, el cubata y la charla en la terraza. Comentamos el viaje, en general, la organización, y demás… Ahora las cosas nos parecen menos duras pero, la verdad, es que han sido días fuertes. Yo me he cansado mucho, me he reído mucho y he dejado todas las neuras en el bolsillo. ¡Ha sido una verdadera desconexión!

 

13-10-2008.Lunes.

FES-MELILLA

 

Sin madrugar por fin! desayunamos y sin perder tiempo emprendemos viaje hacia Melilla. Hoy es fiesta en Melilla y se avecina una gran avalancha de gente para cruzar la frontera. No paramos ni para comer. Lo prioritario es pasar la frontera.

Al llegar a Melilla, efectivamente hay mucha gente para cruzar la frontera. Hacemos cola, papeles, la frontera sigue sin estar limpia, estarán esperando que lo limpien las próximas lluvias, y por fin sabor a casa, un guardia civil me pregunta de dónde sois, de Vizcaya le respondo, se comerá bien ahí me pregunta, mejor que ahí detrás le contesto. Todos se ríen y nos dejan pasar sin mas dilación.

Son la 17:00 y estamos sin comer, tenemos 10 TTs para aparcar y no conocemos Melilla. Aparcamos en el puerto, cerca hay un restaurante al que vamos de cabeza, preguntamos al camarero y nos indica que la cocina esta cerrada, le decimos que somos 19. El jefe sale y nos dice que no nos vamos a ir sin comer.

Para que queríamos mas, nos sentamos, pedimos las mejores birras del local y sin esperar mucho empezaron a salir ensaladas y otros platos muy bien por cierto, siguieron pescaitos y carnes a la brasa a gusto todo del jefe, de postre una gran variedad de dulces.

Hacía muchos días que no comíamos así de bien, que gusto, lo mejor al pagar, muy barato, nos pareció un regalo.

Para hacer tiempo hasta el embarque que era a las 12:00 nos fuimos a tomar un trago a un bar muy bonito que estaba en la zona del puerto deportivo. Al llegar nos cruzamos con el mulah que iba a paso ligero a haber que pasaba con algunos coches, que al parecer les habían cascado una multa. Ya estábamos en España.

A la 1:00 el barco zarpo de Melilla destino Málaga, no antes de pasar los clásicos controles antidroga de la policía. Cogimos los camarotes, mejores que los de la ida, charla en cubierta y rápidamente dormir, de un tirón al puerto de Málaga.

 

14-10-2008.martes

MALAGA-A CASA

Llegamos en torno a las 9:00, Málaga nos recibe lloviendo. Después de otra batería de controles conseguimos salir del puerto. Aunque no nos dejaban parar en ningún sitio conseguimos despedirnos y cada uno siguió camino para casa.

Los del norte nos juntamos varios coches, junto con Dani y Paqui, para pasar por Jaén por casa de Paco a comprar algo de su buen aceite Oliva Extra (www.extravirgen.com), mereció la pena, un aceite espectacular. Continuamos camino, Paqui y Dani a Cataluña y nosotros para el norte, dejando a Leire en Madrid.

Agradecer a la organización, su dedicación y saber hacer en todo momento, nunca nos sentimos desprotegidos, ni en las condiciones más adversas. Agradecer también a todos los miembros de la aventura su tolerancia con el resto del grupo, puesto que las relaciones entre nosotros han sido francamente buenas.

Al que quiera nos vemos en Túnez Octubre 2009.

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Arantza Fica.

Mitsubishi L200.