Marruecos Semana Santa 2006

Dia 7 Abril

Llegó el esperado día de la partida. A primera hora de la mañana, a las 6 salen los coches de Jon/Raul y Javi/Aitor (Los únicos que han cumplido con el horario fijado en la reunión previa preparativa del viaje). El resto, cada uno a su hora. Pero todos con destino a Algeciras. Llegamos al punto de destino, Hotel Las Camelias, a media tarde y Jon va decorando los 4x4 con las correspondientes pegatas de la organización. Los componentes del Grupo son: Jon/Raul -Toyota D4D, Javi/Aitor-Mitsu V6, Alex/Carmen-Nisan Navara, Josemi/Amaya-Suzuki Gran Vitara, Javi/Miren-Jeep Cherokee, Livingstone/Mario-Mitsu V6 Dakar y Luismi/Estrella-Mercedes G.
Cenamos en el Hotel y cada mochuelo a su nido. Excepto los del G que por problemas con el Terracan, cuando estaban viniendo a la reunión, han tenido que darse la vuelta para Granada y coger el G, que estaba parado desde hace seis meses. Ha arrancado a la primera y se han presentado en el Hotel de madrugada, con lo cual prácticamente no han dormido.

Día 8 Abril

Madrugón para coger el Barco en Algeciras rumbo a Ceuta, que perdemos por un error en la información que nos han pasado sobre el horario. Tomamos unos cafecitos y aprovechamos para ir conociéndonos hasta que a las diez embarcamos. El paso de la frontera lo realizamos bastante rápido para lo que es esta Aduana y partimos rumbo a Azrou. Nada mas cruzar la frontera surge un incidente que no tiene consecuencias, pero Livingstone se da un buen susto. Al apretar un botón de los innumerables que tiene el Mitsu, se eyecta el capó que va a parar contra el parabrisas. Como frenar de golpe no puede porque le atizarían por detrás, opta por tomar la referencia de la mediana y consigue parar el coche sin consecuencias, excepto que se desplaza el capó y no se puede cerrar. Comemos en carretera a la sombra de unos árboles y aprovechamos para ajustar el capó del Mitsu.. De camino aprovechamos para hacer una visita a Chefchauen un bonito pueblo cercano a Tetuán. Aprieta el calor y entramos en la Medina, en la cual hay un ambiente fenomenal. En una plaza con varios cafés y mesas a la sombra, nos tomamos unos tés y coca colas (cervezas no sirven) y como el tiempo apremia, nos ponemos en ruta. A pesar del ritmo elevado que llevamos, llegamos de noche a Azrou, Hotel Amros.

Día 9 Abril

Salimos a las 9 de la mañana y empezamos a tomar la pista de montaña que nos conducirá a Tinerhir. En los bosque de cedros, que son espectaculares por su grosor y altura hacemos un alto para ver los monos de Berberia, que se han acostumbrado a las personas y están a que les echemos la jamada. La verdad es que son graciosos. Van apareciendo los primeros niños lapa según avanzamos y pasamos por los diferentes pueblos. Aparecen por todas partes y al principio te hacen gracia, pero según va pasando el tiempo agobian un poco. La pista está rota y empieza a hacer mella en los coches. Pincha el G, que parece que se va a abonar a esta modalidad. Aitor y Javi tienen problemas con el tubo de escape. La pista es preciosa, con numerosos vadeos, y algunas travesías por el río.

En uno de estos vadeos, Jon toma un escalón muy alto para entrar en el río y se queda trincado. No hay mayor problema, se tira de eslinga y sale sin dificultades. Comenzamos a subir y topamos con la nieve, que no impide nuestro paso. Ya anocheciendo llegamos al puerto Tizi Tirherhouzine (2700 m) que a pesar de ser mas alto que el anterior no tiene nieve. Seguimos por la pista a buen ritmo y llegamos a Tamtatouche, en donde cogemos el asfalto y tenemos la agradable sorpresa de que ya no hay niños (este sitio es famoso por las putaditas de los niños del lugar). Parece que el asfalto les ha fastidiado la diversión. Cruzamos las Gargantas de Todra, que no podemos ver y llegamos a Tinerhir sobre las 21 horas. Ha sido un día duro de pistas incomodas, mucho niño, averias (al Mitsu de Javi se le ha caido la parrilla con los 4 focos, aunque no se ha roto ninguno), pero a pesar de todo un bonito día.

Día 10 Abril

Por la mañana Jon acompaña a Luismi a reparar la rueda del G. El resto aprovechamos para visitar las gargantas del Todra con sus elevadísimos murallones, que aprovechan los escaladores para hacer sus pinitos. Han asfaltado todas las gargantas con lo cual le han quitado parte de su atractivo. Todo sea para que los autobuses puedan llegar y el turismo sea más masivo. Es una pena, dado que la llegada por pista desde el Norte y la entrada en las gargantas era preciosa. Ahora también, pero menos. Cargamos los depósitos a tope y salimos hacia Zagora. Comenzamos a atravesar el Jebel Shagro. El paisaje es espléndido con valles muy profundos y elevadas montañas, que en algunos casos nos recuerdan a los tepuis de las películas de vaqueros. Las piedras son casi negras y el paisaje casi lunar nos acompaña por pistas bastante duras.

Después de fuertes subidas nos encontramos en un collado un chiringuito con una tienda-bar bereber donde compartimos una comida muy agradable, ya que la gente va conociéndose y cogiendo confianza. El ambiente es estupendo. Proseguimos viaje por pistas muy pedregosas y que alcanzan alturas superiores a los 2000 mts. Los niños siguen apareciendo pero son tranquilos y no molestan. Rebasamos un grandísimo oued y después de remontar por una pista bastante cortada, llegamos al asfalto y atravesando el valle del Draa llegamos de día a Zagora. Nada mas entrar en el pueblo, nos comienzan a seguir chavales en moto con la intención de captarnos para sus talleres mecánicos. Son unos artistas del marketing. Nos aposentamos en el Hotel y los más valientes se pegan un buen baño, que deja estos cuerpecitos machacados como nuevos. Como hay que dar gusto a las damas, nos dedicamos a las compras y el regateo. En este capítulo destaca claramente Alex, que al final casi acaba vendiendo a los paisas el material que el llevaba. Total que todos contentos y las señoras encantadas. El Mitsu de Javi y el de Livingstone se quedan en el taller para recomponerlos un poco.

Cenamos en el Hotel y nos vamos todos, juntamente con el grupo de gaditanos, a la piscina. Corren las garimbas y los cubas y Gin tonic a velocidad de vértigo. El fin de fiesta es excelente y poco a poco la gente se va retirando a descansar. Jerri decide surfear pos las escaleras del hotel.

Día 11 Abril

Salimos de Zagora rumbo a Tagounite. Lo hacemos en navegación y por parejas. Salen primero el Cherokee y el Vitara, El Mitsu V6 y el Nissan, Livingstone y el G y Jon controlando el tema. Circulamos por pistas rápidas y muy bonitas que nos hacen pensar que estamos en el Dakar. Jon de vez en cuando nos pone por las emisoras la canción África, con lo cual el tema se pone caliente y el acelerador baja a cada momento.

Llegamos sin novedad al primer punto de agrupación en Tagounite. La segunda etapa es hasta el Oasis Sagrado. Salimos en el mismo orden. El tipo de pista es similar, rápida. El cherokee y el Vitara, sufren un error de navegación y vuelven a Tagounite para iniciar la ruta y en el camino se encuentran con el Toyota de Jon, haciendo juntos el resto de camino. En una pista muy rápida y en medio de la nada, el Cherokee se queda sin electricidad y se para. No tiene energía ni para conectar la emisora. Jon no se ha percatado y llega el Vitara, que con su emisora avisa a Jon. Raul revisa el coche y llegamos a la conclusión de que es la batería la que ha cascado. Lo arrancamos con pinzas pero solo aguanta 3 Km. Otra arrancada y nos quedamos a 300 mts. Del Oasis Sagrado . Desde allí al Oasis Jon eslinga a Jeep. En el Oasis están todos los coches excepto Livingston y el G. Pasa el tiempo y siguien sin aparecer. En esta tesitura, con el Cherokke sin batería y dos coches sin aparecer, Jon decide anular el resto de la ruta hasta Iriki. Jon y Raúl retornan a Tagounite para ver si encuentra a Livingston y al G. El resto, incluido el Jeep (que ya funciona gracias a un arrancador guay que tiene Aitor) nos dirigimos a Mhamid a donde llegamos sin mayores problemas. Llegamos al Hotel que tenemos para el día siguiente, pero no tienen sitio. Continuamos buscando y en el Tabarcat hay una habitación donde se quedan Javi y Miren y el resto en el Azalay que está un poco mas adelante. Se hacen las gestiones para conseguir una batería nueva y quedan en que a la mañana siguiente estará en el Hotel.

Quedamos todos a cenar el Tabarkat (tortilla de patatas) y otras delicias. Los propietarios son catalanes y gente muy amable. Recibimos noticias telefónicas de Jon, que ha recibido un mensaje de Living diciendo que están bien y en el Iriki. Al parecer pasaron por el Oasis Sagrado y no nos vieron, continuando ruta. Todo controlado. La llamada de Jon ha sido a 7 Km. y pasa el tiempo y no llega el Toyota. Por fin y al cabo de bastante tiempo llegan Jon y Raúl, muy cansados. Han encontrado un cordón de dunas y han tenido problemas en rebasarlas, teniendo que tirar en varias ocasiones de pala y planchas y además de noche. Pero bueno, ya estamos juntos y el ambiente se relaja. Está claro que las cervezas ayudan a recobrar la calma.

Día 12 Abril

A primera hora traen la batería del Cherokee y todo el grupo nos dirigimos al Hotel que teníamos reservado para hoy en Mhamid. Día de relax, piscina y descanso, ya que se aprecia un fuerte viento, que en las dunas se traduce en tormenta de arena. Llegan Living y Luismi y nos cuentan sus peripecias del día anterior. Acamparon como estaba previsto en Iriki, pensando que nos iban a encontrar allí. Se retrasaron en la llegada al Oasis Sagrado al pinchar en dos ocasiones. Entre baños y charleta llegan las 5 de la tarde en que parece que amaina el viento. Nos dirigimos a las dunas de los judíos, próximas a Mhamid, para hacer boca en las dunas de cara a los siguientes días, ya que nos esperan las de Ouzina y Merzouga. Entramos en las dunas excepto Josemi y Amaya, ya que a esta no le gusta el tema. El primer contacto es una gozada, los coches no tienen problemas de tracción con la presión de los neumáticos a 0,8. Nos dan las correspondientes indicaciones y rebasamos una duna con un corte bastante impresionante. Alguna atascada se soluciona sobre la marcha, y después de un pequeño paseo y dada la hora, nos retiramos al hotel. Todos con ganas ya de afrontar campos de dunas más amplios y durante más tiempo. Tendremos ocasión. En el Hotel, Living acompaña a las chicas de compras y los demás nos quedamos, dándonos unos baños en la piscina, con mucho cachondeo. Ya es de noche y pasamos a tomar en la terraza del hotel unas cervezas. La verdad es que el camarero coge agujetas de los viajes que tiene que realizar para servirnos las diferentes rondas. Aproximadamente un camión de cerveza, y un negocio redondo para el Hotel, ya que nos cobran a 3 euros la pieza.

Nos retiramos a dormir en las habitaciones tienda acompañados de los diferentes sonidos del lugar, búhos, pavos reales, gallos, etc.

Día 13 Abril

Salimos de Mahmid a primera hora de la mañana en navegación y en parejas, como el día de Tagounite. La pista es larga y se fijan puntos de agrupamiento a fin de que nadie se despiste y aparezca en Argelia, que en esta pista esta cerquita. Son 220 Km. de pista hasta Ouzina. La pista es muy bonita y bastante rápida, con hamadas interminables que invitan a pisar el acelerador. El primer punto de encuentro es en un pequeño pueblo en donde, en casa de un tal Baba, nos tomamos unos tes y unas pastas que nos sacan los del lugar. Después de tomar unas fotos del grupo, partimos para la siguiente etapa. El tipo de pista es también rápida y con la navegación ya somos unos expertos. Además en estas superficies tan planas, la navegación es más fácil, ya que prácticamente vas directo al punto de encuentro.

A mitad de camino surge el problema grave del día. El Suzuki se para y se le enciende el chivato de fallo motor, además de otro de aceite. Van llegando los otros coches, ya que el Suzuki y el Cherokee van los primeros. Raúl se pone manos a la obra. Dado que el problema parece electrónico y no hay manera de hacer arrancar el coche, se decide eslingarle hasta la civilización. Se encarga de esta tarea Jon y les acompaña Livingstone.

Partimos todos hasta el siguiente punto de encuentro al que llegamos a la hora de comer. Se trata de un Albergue cerca de unas pequeñas dunas donde comprando la bebida nos dejan comer. Preparamos una comida variada con lo que llevamos cada uno y al finalizar llegan los gaditanos, que también han tenido problema con algún coche, pero lo han solucionado y se preparan a comer.

Nosotros salimos con la intención de esperarles en el albergue de Ramlia y reunirnos para encontrar el sitio de acampada en las dunas, que solo ellos conocen.

La pista es parecida hasta que llegamos a un Oued enorme en donde perdemos la pista. Luismi el del G. retrocede y enseguida encuentra otra vez el camino. Entramos en una pista de arena blanda encajonada entre rodadas y allí la gozamos dando caña a los coches ya que con las rodadas los coches prácticamente iban solos. Una gozada. Esta oscureciendo y llegamos al albergue que está como a dos Km. del pueblo de Ramlia. Nos tomamos unas coca colas y charlamos con la gente del albergue que es muy simpática y además tienen fósiles que tratan de vendernos. Cruza la pista una columna de TT franceses y mientras se hace noche profunda seguimos esperando a los gaditanos. Por fin llegan cerca de las 9 y todo juntos y a un ritmo endiablado y con un polvo que solo se ven los pilotos del que va delante, llegamos a la zona de acampada. Llega entonces Jon, que se ha metido una panzada de Km. y según comenta ha conocido una ruta muy bonita a tener en cuenta.

Montamos las tiendas y cenamos todos juntos mientas dos chicos de la zona nos amenizan con el jembe. Después hacemos la hoguera y alrededor de ella, con buen ron, ginebra y demás líquidos de perdición va pasando la noche. Mucha animación, cada vez más. La verdad es que el sitio y el ambiente son para no olvidar. Miren nos deleita con una especie de baile entre danza del vientre y rock and roll mientras los del jembe siguen tocando. Entre chistes y chufla va pasando la noche. Poco a poco la gente se va retirando, pero Jon pone música de "Los suaves" y la animación sube de tono otra vez. Algo ha pasado después porque a la mañana siguiente la cara de algunos de los componentes del grupo es toda una melodía.

14 de Abril

Toque de diana a las 6,30 y sin desayunar, según nos levantamos, cada uno a su cabalgadura y rumbo a coger el campo de dunas de Ouzina. En cuanto entramos en la arena, se nos pasa el sueño milagrosamente. La verdad es que todos estábamos esperando este momento. Comenzamos atacando una duna bastante alta y empiezan los primeros problemas con la técnica de rebasamiento de la cresta. Entre empujones a veces y alguna eslingada en otras, superamos el obstáculo. Las dunas de Ouzina tienen cortes bastante impresionantes y caídas largas que hay que controlar. Jon nos avisa que lo podemos pasar muy bien, pero si no controlamos y empezamos a quedarnos, puede ser un infierno. Como buenos alumnos, le hacemos caso y vamos rebasando una tras otra todas las dunas que se nos ponen por medio. El cherokee, al no recibir información al tener la emisora el canal equivocado, hace una picada con el morro, que le deja la matricula y los focos planchados, pero sin mayores consecuencias a parte del susto.

Atravesamos entero el erg de Ouzina y después del desayuno, que nos hemos ganado a pulso, partimos rumbo a Merzouga. Pasamos a tomar unas cervezas en Ali el cojo y para proceder a entregarle un cuadro de regalo con la dedicatoria de Cantabria Tracción. Le gusta mucho e inmediatamente lo coloca en la recepción del albergue. Este Alí es un fenómeno. Hace 5 años tenía un pequeño albergue y ahora tiene un fenomenal albergue, con piscina y ampliado a mas del triple de su origen. La verdad es que se lo merece por su buen hacer. Aparecen de nuevo Livingstone y Mario después de terminar las gestiones con el Suzuki. Nos dirigimos al Albergue Tombouctu, gestionado por franceses y muy bonito. Tomamos las correspondientes garimbas y preparamos un self service en la habitación de Jon y Raúl. Media hora de descanso que Living aprovecha para dar una clase teórica de conducción entre dunas. Salimos a media tarde hacia el Erg Chebbi, otro de los hitos importantes del viaje. La verdad es que parece que estamos obsesionados con la arena. Comenzamos la travesía hacia el oasis, superando las dunas sin mayores problemas. Se va notando la experiencia cogida en Ouzina. La gente lo pasa de miedo y los coches se portan, con lo cual va todo sobre ruedas, nunca mejor dicho. Nos está costando llegar a tomar la pista de entrada al oasis, y rebasando dunas divisamos una caravana de dromedarios que nos marca la dirección a seguir. Efectivamente, rebasando unas cuantas dunas enfilamos directamente al oasis. Es un oasis pequeño, pero al estar situado entre grandes dunas, da la impresión de estar en lo más profundo del desierto. La gente está caliente y con ganas de hacer cosas. Jon intenta superar la gran duna y......... lo consigue. Se le ve desde abajo pequeño y la verdad es que parece imposible que un automóvil pueda subir hasta allí. Lo intenta Alex con el Nissan y se queda a medio camino. Después Javi y Aitor con el Mitsu, pero no lo consiguen. Lo mismo le pasa a Livingstone y a Luismi. Alex con la tenacidad que ha demostrado a lo largo del viaje, lo intenta en dos ocasiones más, pero sin resultado positivo. Lo vuelve a intenta en segunda larga Javi, y se queda a escasos diez metros de la cima. Lo que está claro es que este reto sin conseguir va a hacer que mas de uno lo vuelva a intentar en otra ocasión.

Comienza a anochecer y después de reparar un pinchazo que ha tenido el V6 de Javi hacemos la vuelta sin ninguna dificultad. Ha sido una jornada muy completa e inolvidable y la gente está encantada de la experiencia de la arena. Como fin de fiesta, volvemos al Hotel por una pista de arena con tracción trasera, con lo cual la diversión continúa hasta prácticamente la llegada al albergue. Después de cenar salimos para Erfoud, pero el cansancio nos viene de repente y los 50 Km. se convierten en un suplicio por el sueño. En Erfoud repostamos y visitamos una fábrica de fósiles donde se hacen las últimas compras. Vuelta en piloto automático a Merzouga y a descansar que falta hace.

Día 15 de Abril

A las 9 de la mañana y después de desayunar partimos por carretera rumbo a Melilla. Cruzamos el gran palmeral del Tafilaleet, el mas grande de África y atravesamos las bonitas gargantas del Ziz. El viaje es tranquilo ya que tenemos que coger el barco a las 11 de la noche. Tan tranquilos debemos ir que Javi y Aitor nos sorprenden adelantando a todo el convoy y se lanzan como si les persiguiera alguien. Se pasan el cruce y les perdemos. Livingstone se queda en el cruce a la espera de que se den cuenta. Al cabo de media hora los chicos empiezan a sospechar que algo pasa y se dan cuenta del error, retrocediendo hasta encontrar a Living en el cruce. Se disculpan y todos seguimos hacia el mediterráneo. Cruce de la Frontera sin mayores dificultades en Nador y ya en Melilla, después de repostar nos encontramos con Josemi y Amaya, con el Suzuki ya en marcha. Embarcamos y después de tomar unas cervezas y comer unos bocatas, nos retiramos a cada camarote. La travesía, con muy buena mar acaba a las 8 de la mañana, y desembarcamos en Almería. Nos queda cruzar la península. Esto se acaba. Nos despedimos de los granadinos y de los catalanes y el resto rumbo a la triste realidad de la rutina. Pero la vida es así. África sigue allí y sin duda todos esperamos repetir la experiencia.

Javier Gurtubay
Jeep Cherokee